Un yacimiento repleto de animales prehistóricos grandes y llamativos y también de una gran variedad de especies de todos los tamaños fueron hallados por investigadores y alumnos de la Universidad Nacional de La Plata, en dos canteras del partido bonaerense de Marcos Paz.
El hallazgo de los 300 fósiles, cuyo proceso comenzó el 5 de abril pasado, se produjo en apenas mil metros cuadrados de una área cercana al rio La Matanza y unos 40 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires.
"Desde un gliptodonte bebé (animal prehistórico primo lejano de la conocida "mulita") hasta una manada completa de enormes mastodontes, antiguos parientes americanos de los elefantes actuales, fueron hallados en dos canteras de Marcos Paz", informó a Télam David Piazza, responsable de la División Paleontología de esa municipalidad del oeste bonaerense.
Las campañas palentológicas, que se hicieron en dos canteras de la zona, fueron dirigidas por Leopoldo Soibelzon, investigador del CONICET y docente de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata, que trabaja con vecinos aficionados y estudiantes desde 2010.
"Acostumbrados a encontrar menos animales en extensiones de al menos 100 de kilómetros cuadrados, el hallazgo llamó la atención por la abundancia de fósiles de animales en una reducida superficie y la calidad de conservación de los mismos", dijo Piazza.
Los investigadores sostienen que en el lugar debió existir una depresión del relieve que provocó la acumulación de gran catidad de fósiles, como puede ser el recodo de un rio, que arrastró los restos hacia un mismo lugar.
Piazza aseguró que "la acidez del terreno y posiblemente el fango del río en el que quedaron enterrados los huesos de los animales pudo influir en la calidad de la conservación de los restos fósiles".
Además del gliptodonte bebé y varios ejemplares de perezosos, los investigadores hallaron una cueva de una mulita prehistórica gigante, restos de caballos, guanacos, pecaríes y ciervos fósiles, además de tortugas, comadrejas, vizcachas, "tuco-tuco" y gran variedad de aves pequeñas, anfibios y peces.
Los restos de mastodonte, antiguo pariente americano de los elefantes actuales, ya no llaman la atención a los pobladores locales, debido a que se hallaron incluso ejemplares jóvenes de este gigante, lo que le valió el nombre de "Tierra de Mastodontes" a la ciudad de Marcos Paz, dijo Piazza.
"Esta vez, el descubrimiento fue de una manada completa de estos grandes animales que medían cuatro metros del suelo al lomo, hasta hace unas pocas decenas de miles de años", explicó Piazza.
Entre los perezosos gigantes se encontró un Lestodonte, pariente del actual perezoso que vive colgado de los árboles en la selva amazónica.
"Este perezoso no vivía colgado de los árboles, sino que era un caminador de nuestras pampas, y medía más de cuatro metros de longitud", explicó.
Uno de los hallazgos más importantes, añadió Piazza, fue un cráneo y mandíbula completos de Macrauquenia, un mamífero gigante, que no dejó parientes actuales, si bien era parecido a un camello actual, poseía una trompa similar a la del tapir.
Desde hace más de cuatro años, vecinos de Marcos Paz trabajan en la realización, mejoramiento y desarrollo de la paleontología local.
La gran mayoría de los hallazgos se realizaron en una cantera que se está explotando con la finalidad de la extracción de tosca y arcilla para la realizacón de obras.
Las campañas palenteológicas de Marcos Paz fueron realizadas por 36 alumnos y graduados de la UNLP y vecinos aficionados, además del personal de la canteras, y de la Escuela Agraria de Marcos Paz, entre otros.
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