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viernes, 31 de agosto de 2012

Hallazgo arqueológico de una imponente estatua neohitita en Turquía




Una hermosa y colosal escultura humana es uno de los últimos tesoros culturales desenterrados por un equipo internacional en el lugar de las excavaciones que se realizan en el marco del Proyecto Arqueológico de Tayinat, en el sureste de Turquía.

El descubrimiento también incluye una gran base de columna semicircular, decorada de modo muy ornamentado en un lado. Ambas piezas forman parte del complejo de una puerta monumental que daba acceso a la ciudadela de Kunulua, capital del reino neohitita de Patina (aproximadamente entre los años 1000 y 738 a.C.).

Tal como subraya el arqueólogo Tim Harrison, director del Proyecto Arqueológico de Tayinat y profesor de Arqueología del Oriente Próximo en la Universidad de Toronto, Canadá, estas esculturas recién descubiertas en la zona de Tayinat ilustran la vívida tradición escultórica local neohitita. Constituyen una muestra valiosa del carácter innovador y la sofisticación de las culturas de la Edad del Hierro que surgieron en el Mediterráneo oriental después del ocaso de los imperios de la Edad del Bronce a finales del segundo milenio a.C.
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La escultura descubierta. (Foto: Jennifer Jackson)

La escultura, intacta desde la cabeza hasta justo por encima de la cintura, tiene una altura de cerca de 1,5 metros, lo cual sugiere que su longitud total era de 3,5 a 4 metros. El rostro de la figura tiene barba y unos ojos muy bien conservados, hechos de piedra blanca y negra. El cabello presenta una elaborada serie de rizos. Sus brazos se extienden hacia delante desde los codos, ambos con brazaletes decorados con cabezas de león. La mano derecha de la figura sostiene una lanza, y en la izquierda hay una espiga de trigo. Una larga inscripción jeroglífica luvia habla de los logros del rey Suppiluliuma.

Identificado el dinosaurio vegetariano más pequeño que habitó en la Península


Identificado el dinosaur

Foto de Identificado el dinosaurio vegetariano más pequeño que habitó en la Península
Fotografía facilitada por la Universidad de Zaragoza de la maqueta de reconstrucción del dinosaurio vegetariano más pequeño hallado en la Península Ibérica, que ha sido identificado por investigadores de la citada institución académica. EFE
Zaragoza, 30 ago (EFE).- Investigadores de la Universidad de Zaragoza han identificado al dinosaurio vegetariano más pequeño hallado en la Península Ibérica, un animal de apenas dos metros y 20 kilogramos de peso que vivió en el actual yacimiento paleontológico de Galve (Teruel).
Este ejemplar de dinosaurio ha sido descrito y reconstruido por el grupo de investigación Aragosaurus-Iuca a partir del análisis de 104 restos de un único ejemplar de la especie, que conforman el esqueleto más completo de un dinosaurio ornitópodo encontrado en España, según informa en un comunicado la institución académica.
Bautizado como "Gideonmantellia" en homenaje al naturalista inglés del XIX Gideon Mantell, pionero en la investigación de saurópodos, el dinosaurio de Galve era un animal ágil y veloz, con un diseño corporal adaptado para escapar con rapidez de los depredadores al carecer de escudo defensivo.
Los fósiles de este ejemplar de dinosaurio fueron hallados en 1982 en Galve, el yacimiento más importante de Europa continental en cuanto al número de dinosaurios descritos, un total de cuatro, aunque su descripción no se ha realizado hasta la fecha.
Los restos, expuestos desde años atrás en el museo de esta localidad turolense y conocidos desde entonces como "El Hipsi de Galve", han sido objeto de una investigación coordinada por José Ignacio Canudo, coordinador del grupo Aragosaurus-Iuca.
El estudio realizado permitió descubrir que los restos hallados constituían un dinosaurio nuevo no descrito al presentar una morfología única en los huesos de la cadera y comienzo de la cola.
Entre los fósiles se han encontrado vértebras, parte de la cadera y del miembro trasero, incluyendo un pie prácticamente completo, y aunque no se recuperó nada del cráneo, los investigadores cree que dientes aislados hallados en otros yacimientos podrían pertenecer a este ejemplar.
La reconstrucción realizada a partir de los restos apunta a un ejemplar inmaduro de poco más de un metro que no habría dejado aún de crecer y que en su edad adulta podría alcanzar los dos metros de longitud y los 20 kilogramos de peso.
Los restos fueron hallados en los años ochenta del pasado siglo por el investigador José María Herrero, precursor en España de la recogida de fósiles y, especialmente, en la zona de Galve.
Se encontraban depositados en unas arcillas rojas del Cretácico Inferior con una antigüedad de unos 130 millones de años, lo que hace del Gideonmantellia del segundo dinosaurio de esta edad hallado en España.
Estos restos fósiles son los únicos que se conocen de este ejemplar ya que el yacimiento donde se produjo el hallazgo fue destruida por la labor de una mina cercana de extracción de arcillas.
Según las fuentes citadas, la ausencia de la cabeza ha hecho "difícil" la investigación de este ejemplar, que en fechas anteriores fue clasificado junto a otros hallados en Europa, en especial con uno localizado en la Isla de Wight (Inglaterra) llamada Hypsilophodon.
Esta similitud permitiría apuntar a la existencia de una conexión terrestre entre estos espacios geográficos que favorecería la movilidad de estos ejemplares".
El dinosaurio ha sido bautizado también con el sobrenombre "amosanjuanae", en recuerdo a la joven investigadora del grupo Aragosaurus María Olga Amo Sanjuán, fallecida por enfermedad mientras realizaba su tesis doctoral sobre las cáscaras de huevo del Cretácico Inferior en Galve.

Arqueólogos encuentran restos de fauna de la Era del Hielo en Hidalgo



Una excavación permitió hallar más de 100 restos óseos de animales como mamuts y mastodontes y otros que probablemente son de humanos
Jueves, 30 de agosto de 2012 a las 17:11
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Un fragmento de una defensa (colmillo) de un mastodonte estuvo entre los restos óseos encontrados en Hidalgo y que datan de la Era del Hielo
Los restos de un mamut fueron encontrados entre el centenar de huesos que recuperaron los arqueólogos mexicanos cerca de una construcción
Los restos de un mamut fueron encontrados entre el centenar de huesos que recuperaron los arqueólogos mexicanos cerca de una construcción (INAH/Cortesía)
Un colmillo de mamut estaba junto a otros fragmentos cerca de un manantial, donde probablemente murió al acercarse a beber agua, según el INAH
Los vestigios tienen una antigüedad de más de 10,000 años, y corresponden a la época final de las glaciaciones en la región central de México
Otro de los restos encontrados corresponde a un gliptodonte, un mamífero de la época similar al armadillo actual
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Lo más importante
  • Arqueólogos lograron recuperar más de 100 huesos de animales y otros probablemente de humanos que datan de hace más 10,000 años
  • Los restos fueron encontrados por accidente en una construcción que se realiza en Atotonilco de Tula, en el estado de Hidalgo
  • Entre los diversos restos de animales estaban los de un mamut que probablemente quedó atrapado al intentar beber agua, según los arqueólogos
Temas relacionados
Un colmillo de mastodonte estuvo entre los más de 100 huesos encontrados por los arqueólogos del Instituto Nacional de Historia y Antropología (INAH/Cortesía).Un colmillo de mastodonte estuvo entre los más de 100 huesos encontrados por los arqueólogos del Instituto Nacional de Historia y Antropología (INAH/Cortesía).
La arqueología mexicana, a solo un clic
(CNNMéxico) — Más de 100 huesos de animales y otros que probablemente son restos humanos, todos pertenecientes a las glaciaciones de la denominada Era del Hielo, fueron rescatados por arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) luego de que fueron encontrados por accidente durante la excavación de una construcción en Hidalgo.
Los huesos tienen una antigüedad de entre 10,000 y 12,000 años y representan uno de los hallazgos más numerosos de la fauna que habitaba en la región central de México, según dijo el INAH en un comunicado. También se encontraron lo que parecen ser “extremidades” que podrían pertenecer a humanos que cohabitaron la zona, según las primeras investigaciones.
“Los restos óseos de animales extintos —algunos de los cuales llegan a medir hasta 1.60 metros— corresponden a costillas, vértebras, cráneos, maxilares, defensas (colmillos), cuernos y caparazones, de especies tales como gliptodonte, mastodonte, mamut, camello, equino, venado, posiblemente bisonte y otras aún sin identificar”, explicó el INAH.
Todos los vestigios estaban en un área de 100 hectáreas a profundidades de entre siete y diez metros cerca del río El Salto de Atotonilco de Tula, en el central estado de Hidalgo.
Fueron encontrados por accidente, luego de que trabajadores realizaran excavaciones de hasta 20 metros de profundidad, explicó el INAH, para una planta de tratamiento de aguas residuales que se conectará con el drenaje profundo de la Ciudad de México.
Además, los arqueólogos también descubrieron dos herramientas trabajadas por el ser humano que datan del mismo periodo de la última glaciación, conocida como Era del Hielo.
“Los restos óseos estaban en una capa de arena cuyos sedimentos indican que en aquella época existieron cauces que arrastraban corrientes de agua y lodo desde las partes altas hacia el río, lo que ocasionaba deslaves y arrastraba a restos de animales y tal vez de humanos”, según los arqueólogos del INAH.
La arqueóloga Alicia Bonfil Olivera, quien lideró los trabajos de rescate desde marzo de 2011, explicó que entre los restos hallados están los de un mamut joven que estaba a un kilómetro de distancia de la obra hidráulica que dio pie a las excavaciones.
A la orilla de un manantial estaba el mamífero antiguo. “Ahí nos percatamos que el mamut no estaba completo, seguramente hubo corrientes de agua que lo fueron desmembrando”, explicó la arqueóloga. Se encontraron costillas, vértebras, huesos largos de las extremidades, una parte del cráneo y el maxilar sin muelas. Los colmillos se habían astillado y solo quedó una huella marcada en la tierra.
Los expertos creen que, debido a la posición que se encontró la cabeza y los colmillos hacia el flujo del agua, probablemente “el animal bajó a tomar agua y seguramente quedó atrapado en el fango del terreno que rodeaba al manantial”.
Para la arqueóloga Bonfil, los huesos encontrados permitirán ampliar la información acerca de la variedad de especies animales que convivían en la región central del país hace 10,000 o 12,000 años en la parte final de la época del Pleistoceno, donde hubo glaciaciones de la Era del Hielo.

jueves, 30 de agosto de 2012

Desentierran en Cástulo un mosaico del alto imperio romano tras 20 siglos


Jaén, 30 ago (EFE).- Cástulo, la ciudad romana situada a cinco kilómetros de Linares (Jaén), que albergó el último puerto del Betis, muestra estos días un mosaico romano de gran calidad y en perfecto estado de conservación tras estar casi veinte siglos enterrado.
El mosaico, presentado hoy por la directora de las excavaciones, Concepción Choclán, está fechado entre finales del siglo I y principios del II, llamando la atención por su colorido, con teselas de pequeño tamaño, características del Alto Imperio y semejantes a las de Pompeya, de piedra y pasta de vidrio en tonos rojos, amarillos, verdes o azules, y con alegorías en sus esquinas de las cuatro estaciones.
Esto supone una novedad, ya que en Andalucía la mayor parte de los mosaicos romanos pertenecen a una época más tardía, según ha explicado Choclán.
Ha destacado que las imágenes muestran una gran calidad y realismo, muy perfiladas, semejantes a las aparecidas en el norte de África o Sicilia, lo que demuestra la relación que hubo entre Cástulo y esta zona del Mediterráneo.
Dentro de rombos curvos se pueden ver animales de "garra" (que en los romanos legitimaban el poder) como una tigresa, una leona y un león, y animales de pezuña (que unen a la tierra), entre los que se pueden ver un jabalí, un venado y un caballo o una yegua.
La parte central cuenta en escenas, de forma clara, dos mitos clásicos: uno es el del juicio de Paris, por el que comenzó la guerra de Troya, tras el enfrentamiento de Juno, Venus y Minerva por la manzana de la discordia.
También aparece el mito de Selene (diosa griega que en la mitología romana era Luna) y Endimión, pastor del que se enamoró y que cayó en un profundo sueño del que solo despertaba para ella.
Todas estas imágenes recubren el suelo de una habitación cuadrada de unos doce metros por doce, de un edificio del que aún no se ha concretado su uso, aunque se piensa que fue público.
Quizás un altar, la sede de un colegio, o cofradía dedicada al culto imperial, de ahí, su demolición intencionada tras la caída en desgracia o el asesinato de un emperador, como ha apuntado en declaraciones a Efe el director del proyecto Marcelo Castro.
Un edificio al que antes de ser destruido le fue retirada la cubierta, y que, o bien no entró en uso o estuvo funcionando durante muy poco tiempo, sin que se deteriorara el pavimento, que ha aparecido recubierto por una capa de ceniza.
El mosaico ha sido descubierto dentro del proyecto FORVM MMX con el que se trata de recuperar el centro monumental de la ciudad romana, utilizando las últimas tecnologías para la prospección con georradar, además de una nueva metodología en documentación, que ya han dado lugar a la obtención de importante documentación y hallazgos en el sitio arqueológico.
La ciudad de Cástulo no solo tuvo gran importancia en época romana, sino que en época ibera fue la capital de la Oretania, además de escenario de la Segunda Guerra Púnica, que enfrentó a cartagineses con romanos y lugar de nacimiento de la mujer del cartaginés Aníbal, la princesa ibera Himilce.

Hallan restos de un dinosaurio depredador de las primeras aves



Dinosaurio
Foto: UNIVERSIDAD DE ALBERTA/CHEUNG CHUNGTAT
MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -  
   Científicos de la Universidad de Alberta han encontrado evidencias de que un dinosaurio emplumado no volador era capaz de atrapar y devorar a pájaros primitivos.
   El equipo de paleontología encontró los restos fósiles de tres dinosaurios voladores en el vientre de un depredador, llamado Sinocalliopteryx. Este depredador medía unos dos metros de largo. Los dinosaurios voladores en el vientre del Sinocalliopteryx eran tres Confuciusornis. El Confuciusornis fue una de las primeras aves y, según los investigadores, probablemente, solo podía realizar vuelos cortos.
   Los expertos afirman que esta es la primera vez que se relaciona un depredador con la muerte de varios dinosaurios voladores.
   Scott Persons, estudiante de paleontología en Alberta, y coautor de la investigación, apunta que Sinocalliopteryx pudo haber utilizado el sigilo para atrapar a sus presas voladoras. Persons añade que "el Sinocalliopteryx no tenía alas ni las herramientas físicas necesarias para ser un hábil trepador de árboles".
   El Sinocalliopteryx tenía plumas que cubrían su cuerpo, creando un nivel de aislamiento que ayudaba a mantener una temperatura corporal tibia, y el alto metabolismo que requiere la digestión de una gran cantidad de alimentos.
   El fósil fue descubierto en la provincia de Liaoning, en China, y los investigadores de Alberta analizaron los contenidos estomacales de un segundo fósil de Sinocalliopteryx encontrado en la zona. Los investigadores observaron que la última comida de este segundo Sinocalliopteryx fue un Sinornithosaurus, un pequeño carnívoro emplumado del tamaño de un gato doméstico, que puede haber sido capaz de volar. Sinornithosaurus es un pariente del Velociraptor, lo cual significa que esta es la primera evidencia directa de un raptor convertido en comida de otro dinosaurio depredador.

Descubren primeros murales de ancestral cultura maya en Guatemala


El arqueólogo estadounidense William Saturno explicó en rueda de prensa que uno de los murales fue hallado en el proyecto arqueológico regional San Bartolo, del que es su director.
"Descubrimos unos murales impresionantes que cuentan la historia larga y complicada de los mayas. Es una obra de arte sin comparación", comentó.
Según Saturno, el mural descubierto en San Bartolo, cuyo complejo tiene unos 2 kilómetros cuadrados y en donde siguen las investigaciones, está fechado en el año 100 A.C.
El mural, añadió, muestra sacrificios humanos y de animales y su inscripción fue pintada con "delicadeza"
El arqueólogo explicó que el complejo arqueológico de San Bartolo está como a 15 metros bajo la superficie de la tierra.
Detalló que el mural fue descubierto en un túnel en el que llevan cinco años trabajando para poder conservar el sitio de la milenaria cultura maya.
Saturno añadió que el otro mural fue descubierto en el complejo de Xultun, que tiene una extensión de por lo menos 20 kilómetros cuadrados, y de cuyo proyecto también es su director.
Este mural, también adornado con pinturas, dijo, fue hallado en una trinchera por un estudiante, y en el cual se observa una imagen de un rey con tocados de pluma verde que está en una ceremonia tratando de ser un dios Maya.
En el sitio también existe un calendario lunar y una pared que era utilizada por los mayas para sus estudios matemáticos y astronómicos, indicó.
El arqueólogo manifestó que para descubrir todo el complejo, que fue dedicado a los reyes y ancestros mayas, y que data de entre los años 300 a 400 D.C. se llevarán por lo menos 20 años debido a su gran extensión.

Hallan vestigios arqueológicos tiwanakotas en Hampaturi de La Paz



La representación edil para el Fomento de la Interculturalidad evidenció la existencia de terrazas de cultivos y caminos líticos prehispánicos provenientes de la cultura Tiwanaku, que demuestran un conocimiento especializado en la producción agrícola y el manejo del recurso hídrico, en en el macrodistrito Hampaturi, La Paz.
 
La instancia municipal pretende revalorizar el patrimonio arqueológico existente en la ciudad de La Paz, a partir del concepto en aymara: Qhip nayr uñtasisaw sarnaqaña que significa “debemos caminar el pasado para ir adelante” que proviene de una sabiduría milenaria.
 
El arqueólogo Carlos Lemuz, de la Sociedad de Arqueología de La Paz y que participó de la exploración junto a la Delegación de Interculturalidad, dijo que grupos de Tiwanaku se establecieron en pequeños poblaciones, asentándose en mesetas y ampliando la frontera agrícola para el cultivo rotativo de tubérculos andinos.
 
“Los tiwanakotas tuvieron que salvar muchos problemas de altitud, pendientes, erosiones hídricas y eólicas con la implementación de terrazas de cultivos en las laderas que aún se las puede  apreciar en algunos lugares de la ciudad paceña”, enfatizó el experto.
 
Los asentamientos de Tiwanaku en La Paz entre el 400 a 1200 de Nuestra Era obedecieron a una estudiada planificación territorial que priorizaba las áreas de explotación agrícola por la riqueza de la capa orgánica y la proximidad a las fuentes hídricas. También se usaron áreas pastoriles en la puna y bofedales, zonas mineralógicas por las fuentes auríferas, y lugares de  gravas y de arcillas.
 
Las terrazas agrícolas o takanas son un sistema de cultivo que se originó en la época prehispánica y que se instaló en las laderas de las montañas con un sorprendente manejo del recurso hídrico.
 
“El uso de esta clase de tecnología en la agricultura nos demuestra un alto conocimiento que poseían los habitantes de la civilización de Tiwanaku. Ellos tuvieron la capacidad de articular procesos de interculturales no sólo entre diferentes culturas sino también en relación con el medio ambiente”, enfatizó el delegado de Interculturalidad del municipio, Marcelo Fernández.
 
Criticó que el Gobierno central carezca de una gestión en beneficio del patrimonio arqueológico, ya que el Museo Nacional de Arqueología de la ciudad de La Paz permanece cerrado por más de dos años por una supuesta intervención que aún continúa.
 
También existe un descuido en los museos Lítico y Cerámico de Tiwanaku donde importantes colecciones arqueológicas se encuentran en riesgo por la falta de una adecuada conservación y un Plan de Manejo del sitio patrimonial.

Hallan hogueras dormitorio neandertales de hace 60.000 años en Abric Romaní (Barcelona)



Foto de Hallan hogueras dormitorio neandertales de hace 60.000 años en Abric Romaní (Barcelona)
Investigadores del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (Iphes) han descubierto hogueras dormitorio neandertales de hace 60.000 años en Abric Romaní, que han avalado la complejidad organizativa de estas sociedades.
BARCELONA, 29 (EUROPA PRESS)
Investigadores del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (Iphes) han descubierto hogueras dormitorio neandertales de hace 60.000 años en Abric Romaní, que han avalado la complejidad organizativa de estas sociedades.
Según informa el instituto en su web, el investigador y director de la exavación, Edudald Carbonell, ha asegurado que el descubrimiento de hogueras dormitorio cerca de un hogar central, así como su disposición en plaquetas son pruebas "concluyentes" de la complejidad organizativa de los neandertales de esta zona.
El nuevo hallazgo aporta una información de gran relevancia, ya que en el debate sobre la complejidad de esta especie --extinguida hace 25.000 años-- se han discutido aspectos relacionados con su estructura social y la posible hibridación con el 'Homo sapiens'.
Por ello, la campaña realizada este año ha sido concluyente para poder explicar la conducta de estos grupos de homínidos que poblaban Europa desde hace 200.000 años hasta su extinción, así como su capacidad de organización social.
Este miércoles, el Iphes ha firmado un convenio con el Institut Català d'Investigació Química (ICIQ) --dirigido por Miquel Àngel Pericàs--, que permitirá conocer la tecnología y la composición orgánica de estos focos.
Este convenio es un "paso decidido" para avanzar en el estudio de estas hogueras dormitorio, ya que las mejoras técnicas de los últimos años permitirán abordar cuestiones en la arqueología del Paleolítico que hasta hace unos años eran bastante inalcanzables.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Hallan 30 petroglifos en Castrillo de la Valduerna con forma de herradura


verónica viñas | león 29/08/2012
Es una roca legendaria. Conocida en Castrillo de la Valduerna como ‘La pisada del moro y la mora’, en la que hay dos huellas podomorfas, está rodeada por una treintena de petroglifos con forma de herradura que hasta ahora habían pasado inadvertidos. Diego Aparicio, natural de Castrillo de la Valduerna, contactó con el descubridor de los petroglifos de Maragatería, Juan Carlos Campos, para atraer su atención sobre estos singulares grabados rupestres.
El doble podomorfo es un símbolo hasta ahora inédito en la iconografía de petroglifos descubiertos por el aficionado astorgano, donde abundan las cazoletas, surcos, círculos y laberintos.
Campos no se atreve a aventurar si son de época histórica o tienen miles de años de antigüedad. Grabados similares de herraduras y pies humanos aparecidos en Galicia mantienen divididos a los expertos.
Mientras algunos arqueólogos sostienen que son de época histórica, otros en cambio, como el historiador Manuel Santos Estévez, consideran que son grabados rupestres que pudieron funcionar como santuarios en la Edad del Hierro. Para Santos Estévez, «son petroglifos arrinconados por la investigación al ser considerados medievales». Este investigador ha podido demostrar que el grupo de petroglifos de Amoeiro tienen una alineación perfecta con el Sol. Una alineación natural, que se ignora si tendría significado para quienes grabaron la roca.
Los petroglifos descubiertos en León no se han contrastado con un mapa astronómico, con el fin de averiguar si corresponden a puntos concretos del firmamento.
Ritos tribales
Algunos historiadores han asociado los símbolos podomorfos con ritos de investidura de algún jefe local o bien como emblema de la conquista de un nuevo territorio. De confirmarse que los encontrados en Castrillo de la Valduerna son de la Edad del Hierro, serían de época astur; un documento insólito.
Las marcas de herraduras han sido interpretadas por los investigadores como símbolos de la fertilidad y la invocación a la luna. También existen muchas leyendas medievales que relacionan las herraduras con los cascos del caballo del apóstol Santiago y su viaje a Compostela. En Castrillo de la Valduerna no hay ningún relato en torno a las dos ‘pisadas’, de un tamaño imposible hasta para un jugador de baloncesto. Nadie recuerda en la comarca de dónde surge la denominación ‘La pisada del moro y la mora’.
No son dos ‘pisadas’ aisladas, sino que en otra roca cercana hay otro podomorfo, «esta vez más pequeño y proporcionado que el anterior, con dos surcos transversales y acompañado por una treintena de herraduras repartidas por las rocas adyacentes», según Campos, que también localizó un extraño símbolo «formado por tres líneas que se juntan en un extremo». El conjunto más interesante de esta estación rupestre es un grupo de herraduras más pequeñas, más parecidas a cuadrados incompletos que a semicírculos, en las que se aprecia «un piqueteado intenso, como el producido por un utensilio metálico y afilado. Esto quizá indique una cronología posterior si las comparamos con las figuras situadas en el extremo del panel opuesto al podomorfo, en las que se pueden apreciar las herraduras más grandes, más juntas y con un surco más profundo. Aunque se puede apreciar restos de piqueteado, este es mucho más difuminado y recubierto por líquenes», explica en su blog Campos.
Aparte de los grabados podomorfos y de herradura, el aficionado astorgano ha hecho otros descubrimientos. Ha localizado nuevas rocas con cazoletas en Maragatería, en pleno monte, en un paraje cercano a Santa Colomba de Somoza. Según Campos, son de tal sencillez que podrían ser aún más antiguos que los localizados hasta ahora.
La pasión de Juan Carlos Campos por los petroglifos ha resultado contagiosa. Aparte de Diego Aparicio, en junio también Pedro Dios, natural de Priaranza de la Valduerna, localizaba una roca con grabados rupestres en La Degollada. Una gran piedra ligeramente curvada de unos tres metros de ancho por uno y medio de alto, que ha permanecido «miles de años olvidada» y sumergida bajo las aguas de la presa la mayor parte del año. En la roca se aprecian surcos y cazoletas.